mardi 25 mars 2014

El Silencio que nos guía

Esao Andrews
La única posibilidad consiste en confiar en este silencio que nos guía. Los velos de la mente se desgarran, ya no nos identificamos con los pensamientos, la dimensión vertical quema toda la horizontalidad. Para vivirlo, no se necesita ninguna práctica, la meditación está en esta apertura a la vida que se desarrolla. La personalidad conserva una funcionalidad de superficie, pero en realidad, está disuelta en lo no creado, sea cual sea la manifestación de esta personalidad. Ni siquiera una personalidad muy fuerte puede resistir a esta corriente de fuego de una potencia increíble. Las emociones la atraviesan todavía, el miedo, el terror, tan presentes en su vida de antaño, pero una paz ilimitada constituye el trasfondo de esta existencia. Ya no hay nadie para sentir el miedo, o el entusiasmo, lo que hay es el sentir. Todo se vive en su lugar justo, el sufrimiento, la compasión por toda la creación en sus formas más terribles, en este gran corazón que late eternamente y que es capaz de acoger todo este sufrimiento. Este espacio, esta desaparición de la persona, es la realidad de base, el telón de fondo sobre el que se desarrolla la película de la existencia.


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